Sabéis esos días en que no tienes ganas de hacer nada, pues yo esos días leo, bueno leo más, soy una lectora obsesiva/compulsiva, por una parte soy feliz leyendo pero por otra sufro pensando todo lo que tengo que leer y tan poco tiempo para hacerlo.
En ocasiones, no es que vea muertos es que veo libros que no sé si leí o creí leer, así que durante mucho tiempo apunté las novelas que caían en mis zarpas pero en una mudanza perdí los cuadernos….la gran catástrofe.
Una de las razones que me llevó a empezar este blog es que me sirva de cuaderno de bitácora para lecturas pasadas y futuras, puede ser que enloquezca, aun más, porque ya la gente me está proponiendo temas, metiéndome en ganas, y como soy todo corazón ya ando apuntando las lecturas pendientes en la agenda, que Dios se apiade de mí y de mi inconsciencia.
Si algún día pierdo las ganas de sentarme con un libro a la sombra o bajo techo y pasarme horas leyendo, ese día que me aten a un árbol y me dejen morir como un Buendía más.